La apnea del sueño, un trastorno respiratorio que afecta a millones de personas, podría estar estrechamente relacionada con la progresión del glaucoma. Estudios recientes sugieren que las personas con apnea del sueño presentan una mayor prevalencia de daño glaucomatoso. El glaucoma es una enfermedad crónica del nervio óptico que representa una de las principales causas de ceguera irreversible y que, en muchos casos, no presenta síntomas hasta fases avanzadas.
“La apnea del sueño puede contribuir al desarrollo y progresión del glaucoma. Se ha observado que los pacientes roncadores con apneas tienen un mayor riesgo de desarrollar glaucoma, especialmente del subtipo glaucoma normotensivo o de presión ocular baja, así como un mayor riesgo de experimentar un empeoramiento de la enfermedad en comparación con aquellos sin trastornos respiratorios durante el sueño” según explica el doctor Fernando López, oftalmólogo especialista en Miranza Instituto Gómez-Ulla.
La hipoxia intermitente que se produce durante los episodios nocturnos, junto con las alteraciones de la presión intracraneal y la disminución de flujo sanguíneo al nervio óptico, son mecanismos que podrían favorecer el deterioro progresivo del campo visual en pacientes con o sin diagnóstico previo de glaucoma.
La conexión entre ambos trastornos puede explicarse por varios mecanismos: la falta de oxígeno repetida cada noche y los cambios en la presión arterial asociados con las apneas pueden alterar la circulación sanguínea en el nervio óptico y la retina, lo que podría contribuir al daño ocular característico del glaucoma. El reconocimiento de esta relación tiene importantes implicaciones clínicas. Los pacientes roncadores con apneas podrían beneficiarse de evaluaciones oftalmológicas regulares para detectar signos tempranos de glaucoma y monitorizar la progresión de la enfermedad. Del mismo modo, aquellos diagnosticados de glaucoma podrían beneficiarse de la evaluación de trastornos respiratorios del sueño para abordar posibles factores de riesgo modificables.
Es por ello que se incide en la importancia de una atención multidisciplinar que integre la evaluación oftalmológica en los protocolos de seguimiento de pacientes con apnea. “No se trata solo de controlar el sueño, sino también de proteger la visión. Muchos de estos pacientes no presentan síntomas visuales hasta que el daño es irreversible”, afirma el doctor López e incide en la importancia de realizar exámenes oftalmológicos preventivos en pacientes diagnosticados con apnea del sueño, especialmente si existen antecedentes familiares de glaucoma o hipertensión ocular.
Principal causa de ceguera
En España, se estima que aproximadamente entre el 1,5 % y el 2 % de la población mayor de 40 años presenta glaucoma, lo que la convierte en una de las principales causas de ceguera irreversible. Según estudios recientes, podría haber más de 500 000 personas afectadas en España, de las cuales más del 50 % aún no han sido diagnosticadas debido a la naturaleza asintomática de la enfermedad en sus fases iniciales. El desconocimiento de la patología retrasa su detección y, con ello, la oportunidad de aplicar tratamientos eficaces que frenen la progresión visual.