La industria de la salud genera el 30% de los datos del mundo, cifra que ascenderá al 36% en 2025 según un estudio RBC Capital Markets. Se estima que de media cada paciente genera anualmente un mínimo de 80 megabytes de datos clínicos, que incluyen lecturas de sensores, notas clínicas, pruebas de laboratorio, etc. En el caso de los pacientes ingresados, el volumen de datos que se generan es aún mayor, dado que están conectados a diversos aparatos que monitorizan su situación y miden sus constantes vitales.
En este contexto, cada vez son más las iniciativas destinadas a aprovechar esta información para mejorar la atención al paciente, prevenir riesgos y optimizar la toma de decisiones. Un ejemplo de ello son los sistemas de seguimiento y activación, como el National Early Warning Score (NEWS2), que requiere comunicación y colaboración entre los miembros del equipo asistencial, y que el Hospital del Henares, en colaboración con Baxter, ha tomado como referencia para desarrollar el HEWS (Henares Early Warning Score), su propio protocolo de actuación.
Este se basa en un sistema de alertas mediante el que monitorizan las constantes vitales de los pacientes durante su estancia en el centro. “HEWS ha permitido reducir el número de paradas cardiorrespiratorias y la carga de trabajo de los empleados, así como anticiparse a complicaciones y evitar tratamientos más invasivos”, explica el Dr. Federico Gordo Vidal, jefe de servicio de la UCI del Hospital del Henares.
Una delegación de profesionales sanitarios de Milán (Italia) ha visitado esta semana el Hospital del Henares para conocer esta herramienta de valoración objetiva enfermera. La comitiva ha sido recibida por el equipo directivo del centro, y han podido observar y aprender los protocolos de actuación del hospital y cómo su sistema de alertas ayuda al personal sanitario a anticiparse al empeoramiento de los pacientes. “El interés de la visita es ver cómo desarrollamos nuestro modelo de trabajo de UCI sin paredes”, declara el doctor Gordo. “Tienen interés en cómo integramos a los diferentes equipos profesionales y los distintos sistemas de historia clínica electrónica además de todo el sistema de alertas”.
Cómo funciona HEWS
Los pacientes ingresados en el Hospital del Henares son monitorizados diariamente para conocer y comparar sus constantes vitales durante el tiempo que permanecen en el centro. Las constantes que se tienen en cuenta son la frecuencia cardíaca, la presión arterial sistólica, la saturación del oxígeno, la frecuencia respiratoria del paciente y el estado mental, que puede variar desde alerta hasta apático o confuso.
Los datos se vuelcan en la historia clínica electrónica mediante la lectura de la pulsera del paciente. Estos valores, dependiendo de la desviación que tengan, dan una suma que marca el protocolo de actuación. En función de los resultados obtenidos por el algoritmo se establecen tres niveles de intervención.
· Un valor de 0 a 3 significa únicamente seguir con la toma de constantes.
· Un valor de 3 a 7 significa avisar al médico responsable o a Medicina Interna, en caso de que sea una guardia.
· Si el valor es superior a 7 el sistema comunica directamente el aviso a médicos de UCI.
HEWS contribuye a una mayor seguridad de los pacientes ingresados y permite proveer una atención más eficiente
Con este sistema se minimizan los errores de transcripción y se facilita la consulta en tiempo real, pero también se ayuda a prevenir futuras complicaciones. Un reflejo de ello es que los médicos del hospital han constatado que, desde que se implementó el uso de HEWS, el riesgo de paradas cardiorrespiratorias ha disminuido.
Otra de las ventajas de este sistema es la disminución de carga de trabajo de los equipos, dado que pueden detectar las complicaciones de forma precoz. Esto les permite, con un cambio de medicación o un reajuste más simple en el tratamiento, evitar actuaciones más agresivas e invasivas en un futuro con un empeoramiento que no habrían detectado en el paciente sin el sistema de alerta temprana. De esta forma, los sanitarios pueden dedicar más tiempo al cuidado directo del paciente, lo que se traduce en una mejor atención y más eficiencia.
La comunicación y la coordinación del personal sanitario implicado es clave para el correcto funcionamiento de los sistemas de alertas tempranas
Tanto en el caso de HEWS, como en el de otras iniciativas similares que tratan de mejorar el pronóstico del paciente y reducir la carga de trabajo de los sanitarios mediante un sistema de alertas tempranas, es imprescindible una buena comunicación y coordinación que garantice el correcto funcionamiento de los flujos de trabajo. El equipo debe de estar alineado y en constante colaboración para dar sentido a todos los datos que apoyan y optimizan la toma de decisiones. Para ello es imprescindible una figura de coordinador y habilidades no técnicas como el trabajo en equipo y el liderazgo.
La integración de las tecnologías digitales y la atención conectada se ha vuelto más crítica que nunca en el panorama sanitario. La pandemia de COVID-19 ha puesto aún más de relieve la necesidad de aprovechar las herramientas digitales para hacer frente a los retos existentes e impulsar un cambio sin precedentes en la prestación de asistencia sanitaria.