España podría superar en 2024 la histórica barrera de 50 donantes de órganos por millón de habitantes y se consolida como referente mundial

Las cifras de trasplantes superarán este año por primera vez las de antes de la pandemia, según la previsión que manejan desde la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Así lo dejó entrever su directora de los servicios médicos, Elisabeth Coll, que mostró su optimismo con el resultado que ofrecerá la presente campaña de donación de órganos, a apenas unos días de finalizar: “Creo que se va a rebasar la barrera de los 50 donantes por millón de habitantes que actualmente se encuentra en 48,9”, afirmó durante la I Jornada Nacional de Solidaridad entre Trasplantados y Donantes, que se celebró este martes en el campus de UNIVERSAE de San Sebastián de los Reyes. La institución de educación superior acogió este evento, dentro del marco de colaboración que mantiene con el equipo Titán Deja Huella ONT, con el objetivo de impulsar las donaciones de órganos a través de experiencias personales y como homenaje y reconocimiento a la excelente labor que desde hace años realiza la ONT.

Entre los grandes objetivos, Coll destacó la importancia de mantener esta tendencia ascendente en relación al número de donantes que se viene produciendo desde la finalización de la pandemia. Coll quiso señalar el importante papel de la generosidad de la gente, el descubrimiento de nuevas técnicas de trasplante y la mejora de las ya existentes. Durante su ponencia explicó con detalle la historia de la organización, la evolución que ha experimentado desde su fundación en 1989 hasta hoy y las perspectivas de futuro que se vislumbran con los recientes avances médicos.

La I Jornada Nacional de Solidaridad entre Trasplantados y Donantes también contó con varias mesas redondas que recogieron los testimonios de donantes y trasplantados de médula, así como la intervención del director de la Fundación para la lucha contra la Leucemia, Antonio López Bermejo, y el director del proyecto Titán Deja Huella, Héctor Vargas. Todos ellos coincidieron en la felicidad que produce donar un órgano y de lo sencillo y poco invasivo que resulta gracias los avances médicos, que permiten conseguirlo sin sufrir ningún tipo de impedimento que afecte al desarrollo de una vida normal.

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