El Streptococcus pneumoniae, la bacteria del neumococo es una de las principales causas de infecciones respiratorias agudas e invasivas en todas las edades, que afecta principalmente a los dos extremos de la vida, niños y adultos y es el responsable de un elevado número de hospitalizaciones. De hecho, los estudios demuestran que las tasas de hospitalización por esta bacteria en niños de hasta 1 año de edad fueron de 18,6 casos por cada 10.000 habitantes, disminuyendo con la edad hasta la adolescencia y volviendo a aumentar con la edad hasta alcanzar los 65,75 casos por cada 10.000 en los mayores de 85 años.
Una de las principales patologías que produce el neumococo es la neumonía, un tipo de infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones y que puede estar causada por virus (gripe, virus respiratorio sincitial, rinovirus, entre otros), hongos o bacterias Además de neumonía, la enfermedad neumocócica puede provocar otras afecciones como: otitis media, meningitis neumocócica y bacteriemia y septicemia.
En España, el uso de las vacunas conjugadas neumocócicas ha contribuido a una disminución en la incidencia de los serotipos vacunales causantes de enfermedades invasivas y no invasivas, tanto en niños vacunados como en no vacunados y en adultos. “La vacunación sistemática contra el neumococo en niños ha representado un antes y un después al reducir la carga de enfermedad y los casos más graves. Los más vulnerables son los niños menores de 5 años y, en particular, los menores de 2 años. El desarrollo de vacunas conjugadas antineumocócicas representa un gran avance, ya que aportan mayor protección a largo plazo y actúan sobre la nasofaringe de los niños, que es el principal foco de transmisión de la enfermedad”, explica el doctor Fernando Baquero Mochales, Profesor de Investigación en el Área de Biología y Evolución de Microorganismos, Instituto Ramón y Cajal de Investigaciones Sanitarias (IRYCIS), Servicio de Microbiología del Hospital Ramón y Cajal, e investigador del grupo 33 del Centro de Investigación Biomédica en Red en Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP).
A pesar de que en 2020, primer año de la pandemia, se produjo una marcada reducción de los casos de enfermedad neumocócica invasiva en el grupo de edad de menos de 2 años, en 2022, coincidiendo con el fin de las medidas no farmacológicas, se observó un restablecimiento de los niveles prepandémicos. De hecho, entre 2022 y 2023 se ha observado un aumento importante del serotipo 3 en niños, convirtiéndose también en el dominante en adultos mayores de 65 años. “Teniendo en cuenta el carácter evolutivo de la bacteria, resulta imprescindible contar con sistemas robustos de vigilancia epidemiológica para evaluar en cada momento los serotipos más prevalentes y así poder modificar las estrategias incorporando las vacunas que mejor respondan a las necesidades de cada momento”, señala el doctor Fernando Baquero Artigao, coordinador de la Unidad de Infectología Pediátrica del Hospital Universitario La Paz de Madrid.
En este sentido, la compañía biofarmacéutica MSD destaca, en el marco del Día Mundial contra la Neumonía, su fuerte compromiso con la lucha frente al neumococo, siendo pionera en la investigación y el desarrollo de soluciones que protejan frente a esta bacteria. “Nuestro compromiso sigue siendo firme. Por ello, hemos trabajado y seguimos trabajando en la investigación de nuevas vacunas que se adapten a las nuevas necesidades en materia de salud. En la actualidad estamos enfocados en ofrecer una protección robusta frente a los serotipos más agresivos, como es el serotipo 3. En MSD apostamos por la investigación como papel fundamental para dar respuestas específicamente diseñadas para las necesidades futuras y que actualmente no se encuentran cubiertas”, destaca el doctor Gonzalo Fernández, Director Médico de Vacunas y Medicina General de MSD.