Un uso excesivo del móvil, la tablet o el ratón del ordenador. Malas posturas sentados, largas horas de pie que repercuten en la espalda… Son algunos de los riesgos laborales que pueden provocarnos dolencias físicas que limitan nuestro desempeño habitual.
En el Día Mundial de la Salud y Seguridad en el Trabajo, que se celebra el 28 de abril, Marta Cañada, fisioterapeuta del Hospital Vithas Vitoria, explica las patologías físicas más habituales en el mundo laboral, que dependerán “del tipo de profesión a la que la persona esté expuesta”.
Entre las patologías musculo esqueléticas más comunes se encuentran la epicondilitis (codo de tenista) y epitrocleitis (codo de golfista). Aparecen al realizar, durante un largo periodo de tiempo, un movimiento repetitivo. Tanto en estático como en dinámico, con o sin peso.
Las lesiones en el manguito rotador del hombro obedecen a “gestos forzosos con exceso de peso, acompañado de una mala ergonomía corporal”. Y las cervicalgias, dorsalgias o lumbalgias de la columna, “las más comunes”, vienen dadas por una postura corporal mantenida. “Como estar mucho tiempo de pie, y falta de educación postural”.
El uso prolongado del ordenador y del ratón, los movimientos repetidos o “la aplicación de una fuerza excesiva o presión constante sobre la muñeca” provocan el síndrome del túnel carpiano. “Es una compresión del nervio mediano a la altura de la muñeca”, indica la experta de Vithas Vitoria. Entre sus síntomas más comunes, figuran el dolor de muñeca y/o antebrazo, la debilidad y el adormecimiento.
¿Y qué hay de los móviles? Si los usamos en exceso (para el trabajo, enviar emails, WhatsApp, hacer foto, buscar información…) realizamos movimientos repetitivos de los pulgares, lo que deriva en lesiones en los tendones. “Especialmente en los flexores del pulgar, que producen dolor y, en algunos casos, irradia hacia la muñeca”, advierte Cañada.
Lo mismo ocurre, con las tablets, en el dedo índice, al ser el dígito que más empleamos con ellas.
Y hay más. Los trabajos que implican esfuerzo físico: estar de pie largos periodos de tiempo, movimientos repetitivos o posturas forzadas como arrodillarse y agacharse frecuentemente, pueden ocasionar lesiones de rodilla. Entre ellas: bursitis, meniscopatías, tendinitis, síndrome de cintilla iliotibial… Sus síntomas más comunes van “desde dolor localizado o irradiado, rigidez articular o inflamación de la zona, hasta hormigueo o entumecimiento”.
Dolencias que podemos prevenir o aliviar. Primero, con una buena higiene postural. Es importante “ajustar la altura de mesas y sillas. Y usar sillas ergonómicas, con respaldo ajustable, para que la espalda esté apoyada y los hombros relajados, con los codos en ángulo recto”.
Conviene “mantener la pantalla del ordenador a la altura de los ojos”. Y, además de “no abusar” del móvil, tablet y ordenador, la experta de Vithas Vitoria recomienda evitar movimientos repetitivos y realizar “descansos cuando trabajamos en el ordenador”. “Cambiar de postura, no estar largos periodos de tiempo en la misma posición, y hacer ejercicios de estiramiento y movilidad para aliviar la tensión”, incide.
“Levantarnos de la mesa y caminar nos ayudará a activar la musculatura y evitar sobrecargas indeseadas”, apunta Cañada.
Así, aconseja ejercicios de fortalecimiento muscular. Y de core para la zona central del cuerpo. “Mejoran la resistencia, la estabilidad articular y la postura durante el trabajo. Son una inversión en salud, productividad y seguridad”, recalca.
Aunque, una vez desarrolladas las patologías, y según el grado de la lesión, su tratamiento puede ir “desde el reposo” a la necesidad de acudir a un servicio de fisioterapia o, incluso, un tratamiento médico “más invasivo”.